Panorámica semanal: el fin de la «Wild Wild Web»
Internet está cambiando. Tal vez para siempre: Su propia fuerza como vehículo de acción política está haciendo imposible mantener el enfoque original de «laissez faire» acerca de lo que podía y no podía hacerse en la web. Esta semana varias aplicaciones y sitios web han prohibido docenas de cuentas, buscando atenuar el «discurso de odio» que se supone que se está propagando. Incluso para las empresas que trataban de mantener el status quo «neutral» del principio, la presión se ha vuelto demasiado fuerte. Y a algunos analistas les recuerda a «la ruptura de una presa, o un cambio de guardia» (Leer)
Las aplicaciones se están convirtiendo en canales para las luchas políticas: Un buen ejemplo estos días es TikTok, la aplicación china para jóvenes, que recientemente ha pasado de ser lo que alguien mayor de 20 años podría considerar un repositorio de vídeos absurdos, a convertirse en una herramienta para el activismo político. La aplicación ha ayudado a la «Gen Z» a boicotear los mítines de Trump y a ampliar el alcance de las protestas de «Black Lives Matter». Un profesor de Columbia discute el fenómeno en esta entrevista del NY Times (Leer)
Esto está poniendo a Facebook entre la espada y la pared: Como dueño de al menos dos de las principales aplicaciones sociales, Facebook está en medio de todo este lío. Y están sufriendo por ello. La empresa intentó inicialmente mantener su «neutralidad» y evitar controvertidas prohibiciones de contenido, que podían llevarles a conflictos con algunos grupos. Pero lo tienen cada vez más difícil, porque ahora hasta 400 grandes anunciantes como Verizon, Unilever, Ford, Coca-Cola e incluso Microsoft han decidido o están considerando boicotear la plataforma por falta de transparencia sobre qué tipo de contenido podría aparecer al lado de sus marcas. La medida podría afectar a los ingresos de la empresa, por encima del ya negativo declive estructural del mercado publicitario por la pandemia. Esta semana, Facebook ha estado hablando de esto con sus mayores anunciantes (Leer)
El mayor riesgo para Facebook sería que la presión se expandiera a la «long tail», ya que la mayor parte de sus ingresos por publicidad provienen de pequeñas y medianas empresas. Según la opinión del FT, lo bueno para Facebook es que estas compañías tienen pocas alternativas para anunciarse (Leer)
YouTube se está moviendo rápido para evitar que les pase lo mismo: YouTube anunció esta semana que prohibirá seis canales conocidos por su contenido supremacista, y esto obviamente parece una manera de evitar ser acusado de «pasividad» y potencialmente boicoteado por los anunciantes (Leer)
¿Hay que controlar al mensaje o al mensajero? Un interesante debate está surgiendo en paralelo con todo esto. La manera en que se difunde la información por Internet recuerda a… las epidemias, y parece que algunos “influencers” concretos son los responsables de la «súper difusión» de los contenidos que causan los mayores impactos. Así que tal vez «limpiar» las noticias falsas sería más fácil si las plataformas se concentraran en un número limitado de cuentas famosas (Leer)
La presión reguladora ya está aumentando sobre las empresas Big Tech: Y no sólo por el contenido / cuestiones políticas. El Congreso de Estados Unidos está llevando a cabo una investigación sobre el poder de las Big Tech en el mercado digital, y esta semana nos hemos entereado de que los directores generales de Amazon, Facebook y Google han accedido a testificar ante el Comité Judicial de la Cámara a finales de julio. Algunos informes de prensa están esperando «un espectáculo de los que hacen época» (Leer)
En Estados Unidos el Departamento de Justicia podría lanzar una demanda antimonopolio contra Google: Hay una investigación en curso por comportamiento monopolístico en el mercado de la publicidad digital, y algunos fiscales de los Estados proponen expandirlo a otros mercados. Un riesgo adicional para Google es que esto podría expandirse más allá de Estados Unidos. Por ejemplo, un debate similar se ha iniciado ya en el Reino Unido (Leer1)(Leer2)
Facebook también está bajo escrutinio por la forma en que gestiona los datos de los usuarios: Esta semana reconocieron, en una entrada de blog, que habían compartido erróneamente los datos personales de algunos usuarios con desarrolladores externos durante un período de tiempo más largo que los 90 días que habían establecido públicamente como límite. Hay mucha sensibilidad hacia estos temas, ya que compartir datos con los desarrolladores fue exactamente lo que provocó el escándalo de Cambridge Analytica en 2018 (Leer)
Los impuestos (internacionales) son un frente adicional: Europa ha estado tratando de obtener más ingresos fiscales de las grandes empresas tecnológicas, pero los norteamericanos se oponen, ya que lógicamente implicaría que ellos recibirían menos. Ahora las negociaciones (dentro de la OCDE) están suspendidas, pero el ministro de finanzas irlandés comentó al FT esta semana que es optimista sobre la posibildad de llegar a un acuerdo (Leer)
Nuevas batallas de la Segunda Guerra Fría
La Guerra Fría que invade la mayoría de los mercados tecnológicos se mantiene en plena forma. Esta semana aprendimos más cosas sobre las diferentes batallas en curso:
En las redes:
Aumenta la presión americana sobre los proveedores chinos de 5G: El regulador de telecomunicaciones norteamericano (FCC) ha decidido esta semana designar a Huawei y ZTE como «amenazas a la seguridad nacional». Esto se traduce en que las compañías de conectividad rural no podrán usar las subvenciones gubernamentales que reciben de cara a comprar o mantener equipos de los proveedores chinos. La decisión se justifica por la visión de que el Partido Comunista Chino podría explotar las vulnerabilidades que estos equipos podrían crear en las redes de comunicaciones de Estados Unidos (Leer)
Y parece que esto podría afectar la posición de estas compañías en otros mercados, por ejemplo, el Reino Unido: El Secretario de Cultura Británico dijo este martes que las sanciones de Estados Unidos contra Huawei «probablemente» afectarán la posición de la compañía en el mercado británico de equipos 5G. Este fue el mismo día en que el Primer Ministro afirmó que el gobierno necesita «encontrar un equilibrio para proteger la infraestructura crítica de los vendedores hostiles». El domingo, algunos periódicos británicos daban por seguro que Huawei será prohibido (Leer)
¿Será adquirida Nokia (y/o Ericsson)? : Incluso las dos empresas que aparentemente podrían beneficiarse de la prohibición de Huawei, Ericsson y Nokia, se perciben en una posición inestable. Por ejemplo, hay muchos rumores de que Estados Unidos podría tratar de adquirir una participación en una de ellas (o en ambas), directamente o presionando a una empresa tecnológica norteamericana para que lo haga. Nokia parece ser la más débil de las dos, pero incluso en Ericsson un accionista “activista” (Cevian Capital) está presionando a la alta dirección para que considere una posible adquisición por parte de los norteamericanos (Leer)
Nuevos suministradores «disruptivos» están tratando de beneficiarse de todo esto: Ya hablamos la semana pasada sobre la adquisición de una participación en NEC por parte de NTT, aparentemente para apoyar el desarrollo de equipos de «Open RAN» que podrían ser vendidos a compañías con «restricciones sobre Huawei». Simultáneamente, un artículo del Washington Post de esta semana hablaba de Inland Cellular, un operador rural norteamericano, que está construyendo una red «Open RAN» con Parallel Wireless, una startup especializada en este campo, y sobre las afirmaciones de O2UK sobre que esta tecnología emergente es su futuro, y sus pruebas con Mavenir, otra startup (Leer1)(Leer2)
En las aplicaciones:
Las tensiones políticas con China están empujando a la India al bloque anti-chino: Esta semana el gobierno indio citó preocupaciones relacionadas con la ciberseguridad y anunció la prohibición de docenas de aplicaciones móviles chinas, incluyendo las masivamente populares TikTok y WeChat. El detonante ha sido un enfrentamiento fronterizo entre las tropas indias y chinas, en el que murieron 20 soldados indios. El resultado parece favorable para las grandes empresas de tecnología americanas como Amazon, y Facebook (Leer)
Apple, con enormes intereses en China, está tratando de navegar cuidadosamente la crisis: Bajo la presión del gobierno chino, Apple ha anunciado esta semana que congelará las actualizaciones de decenas de miles de juegos para móviles en su App Store, hasta que puedan demostrar que tienen licencias oficiales. Hay un enorme valor en juego, ya que China es el mayor mercado de la App Store de Apple (incluso más grande que Estados Unidos) con ventas anuales de $16,4bn (Leer)
Y (obviamente) en ciberseguridad:
Australia está reclutando 500 «ciber-espías», en medio de una crisis diplomática con China: El Primer Ministro australiano ha anunciado una gran inversión pública ($930m) en seguridad digital y la contratación de 500 «ciber-espías» adicionales para defender al país de los «ataques constantes» de un «actor estatal sofisticado» que no nombró. Esto se produce en medio de una crisis diplomática con China, desencadenada por el coronavirus (Leer)
Incluso los equipos de control de seguridad de los aeropuertos se ven afectados: Estados Unidos está presionando a Europa para que prohíba a Nuctech Co, el mayor proveedor chino de escáneres de seguridad para lugares como aeropuertos y pases fronterizos, ya que estos dispositivos podrían ser una amenaza para la seguridad y para las empresas occidentales (Leer)
Movimientos financieros para después de la pandemia
En medio de la Segunda Guerra Fría, los inversores se interesan por las tecnologías para la defensa: Anduril, una nueva empresa que desarrolla tecnología de vigilancia para agencias militares y patrullas fronterizas, acaba de recaudar una nueva ronda de financiación con una valoración de $1.9bn. La compañía está respaldada por el Founders Fund de Peter Thiel (Leer)
La inversión del Reino Unido en una compañía de satélites también tiene un aroma «geoestratégico»: Hablamos la semana pasada de la participación del gobierno británico en una oferta de $500m por el 45% de OneWeb, la empresa de satélites, aparentemente vinculada a la necesidad de construir un servicio de navegación alternativo al actual GPS, con posibles aplicaciones militares. Bharti Global, la matriz del grupo de telecomunicaciones Bharti, ha adquirido otro 45% (OneWeb también tenía planes de desplegar una constelación de satélites para proporcionar acceso inalámbrico a Internet a nivel mundial) (Leer)
Pero también hay operaciones más «pacíficas», financiando herramientas para la digitalización masiva… Google se va a gastar cerca de $200m en la compra de North, una startup que desarrolla «gafas focales”, capaces de captar los movimientos de los ojos del que las lleva. Parece un segundo intento de construir las “Google Glasses”, y la empresa ha dicho que es parte de su esfuerzo por «construir un futuro donde tengas ofertas de ayuda a tu alrededor, todos tus dispositivos trabajen de forma coordinada y la tecnología se diluya al fondo» (Leer)
… Y una economía más verde: Una nueva empresa alemana que desarrolla «granjas de interior», para cultivar hierbas y ensaladas en lugares como supermercados y restaurantes, está cerrando una nueva ronda de financiación de $200m, captando el interés de los inversores por soluciones para abordar posibles problemas de suministro de alimentos (como algunos de los que se han puesto de manifiesto durante la pandemia) (Leer)
Los acuerdos continúan en toda la cadena de valor, desde la conectividad… Noticias esta semana sobre los dos mayores acuerdos en curso en la industria de las telecomunicaciones, la fusión de O2UK con Virgin Media, con los reguladores británicos y europeos compitiendo para dar la autorización final de la transacción, y la venta de participaciones en Reliance Jio, el disruptivo operador indio, que acaba de anunciar la entrada de otra empresa occidental (Intel) en el capital (Leer1)(Leer2)
… Al comercio electrónico… También en el marco de la «Guerra Fría» por los mercados tecnológicos del sudeste asiático, Google está negociando con Temasek, el holding estatal de Singapur, para invertir juntos en la empresa indonesia de comercio electrónico Tokopedia. Se rumorea que se trataría de una ronda de financiación de entre $500m y $1bn (Leer)
… Y la entrega de alimentos: Uber, que recientemente se rumoreó que estaba interesada en adquirir Grubhub, está ahora en conversaciones para comprar Postmates, otra empresa de entrega de alimentos, con sede en San Francisco, con una valoración de unos $2.6bn. La primera conclusión es que está claro que Uber se cree el potencial de su subsidiaria Uber Eats (Leer)
Cubriendo los huecos que el virus ha destapado
El acceso a Internet se está convirtiendo en un nuevo «derecho humano«: En realidad, las Naciones Unidas declararon el acceso como derecho humano en 2016, pero la crisis de COVID ha demostrado hasta qué punto esto se está convirtiendo en una cuestión clave, ya que se espera que el impacto económico de la pandemia sea muy diferente para las clases profesionales de los países ricos, que suelen tener buenas conexiones, frente a las comunidades rurales remotas y urbanas más pobres, mucho más desconectadas del mundo digital. Así que ahora aparece una prioridad para que los gobiernos cierren la enorme «brecha digital» que se ha revelado (Leer)
Incluso en países avanzados, algunas infraestructuras no están preparadas para la «nueva normalidad«: En Estados Unidos, hay mucha preocupación estos días sobre el impacto potencial que los confinamientos podrían tener en las redes de telecomunicaciones a partir de las próximas semanas. Las infraestructuras han resistido el aumento del tráfico debido al trabajo y al estudio desde casa, alrededor de +50% según algunas estimaciones, pero esto puede deberse a que las primeras zonas afectadas han sido en su mayoría urbanas y relativamente prósperas. Ahora, con el virus expandiéndose a los estados con grandes poblaciones rurales, se esperan cortes e interrupciones de servicio (Leer)
Necesitamos mejores herramientas para luchar contra las epidemias: Se están discutiendo muchas propuestas: algoritmos para predecir hacia dónde se desplazará la pandemia (Leer), robots autónomos para minimizar las tareas humanas en fábricas y preservar la distancia social (Leer), superficies auto-limpiables, lámparas ultravioletas (montadas en robots) o sistemas de ventilación de última generación para proteger las oficinas (Leer)
El comercio necesita cambiar (más) a digital: Y, como ya hemos discutido en informes anteriores, empresas como Shopify, especializada en ayudar a las empresas a digitalizarse, están teniendo un éxito que ni ellas mismas esperaban. El «sistema operativo de venta online» de la compañía ha generado un crecimiento en las ventas de más del +60% en sólo seis semanas. De una manera diferente, pero obvia, Amazon se beneficia también de la crisis, o al menos eso es lo que los ven los inversores, y la razón por la que la capitalización de la compañía ha aumentado en +$400bn este año (Leer)
Pero la gente todavía parece reacia a abandonar el dinero en efectivo: Incluso en medio de esta rápida transición al comercio digital, los datos revelados esta semana por un ex ejecutivo del Banco de Inglaterra muestran un aumento de los billetes en circulación en las economías occidentales. En estos mercados, la causa podría haber sido el pánico, ya que la gente puede ver los billetes como una herramienta «más segura» que las propias cuentas bancarias. Pero además, en los mercados emergentes existe un problema de «brecha bancaria», con mucha gente sin acceso al sistema bancario, y una «brecha digital» que afecta a las pequeñas empresas que no pueden pasar fácilmente al mundo digital. En resumen, parece que los pronósticos sobre la «muerte del dinero en efectivo» eran en gran medida exagerados (Leer)
¿Realmente necesitamos eventos masivos (físicos)? Apple acaba de organizar una versión virtual de su Conferencia de Desarrolladores, y todo el mundo parece haberse quedado contento. Aunque los invitados aceptan que se perdieron las «interacciones sociales fortuitas» de las antiguas conferencias «físicas», esto se ha compensado con un acceso más sencillo al evento y por unas presentaciones «más productivas» (Leer)
Otras noticias de las Big Tech
Los desarrolladores de aplicaciones tratan de eludir las reglas de la App Store de Apple: Algunos desarrolladores de aplicaciones, incluidas grandes marcas como Netflix, Amazon o Rakuten, están sacrificando parte de la experiencia del cliente para evitar pagar las comisiones de la App Store de Apple (30%). Cada vez más, los clientes se ven obligados a salir de las aplicaciones y visitar las páginas web de las empresas, para formalizar las suscripciones. Otras aplicaciones están cambiando las tarifas a los usuarios finales, con precios en la aplicación aproximadamente +30% más altos que en la web (Leer)
El New York Times ya no distribuirá contenidos por Apple News: Hablamos la semana pasada, con el caso de Google, de que las compañías de medios y las plataformas de Big Tech estaban por fin empezando a trabajar juntos. Pero hay excepciones significativas, y un buen ejemplo ha llegado esta semana, con el NY Times anunciando que va a retirar su contenido de Apple News (la aplicación de agregación de noticias de Apple), buscando «asegurar más control». Al final, esto también parece una cuestión de dinero, ya que el periódico menciona la necesidad de ser «justamente compensado», y el tema del «control» puede estar precisamente relacionado con la capacidad de convertir a los lectores en suscriptores de pago (Leer)
Las ambiciones de Amazon en materia de juegos chocan con un obstáculo: Amazon ha retirado de la circulación su primer videojuego de gran presupuesto («Crucible»), y ahora es una beta que sólo se puede descargar por invitación, mientras los desarrolladores cambian cosas, después de un lanzamiento no muy brillante, en el que han recibido muchas críticas negativas (Leer)
Los dos gigantes tecnológicos chinos (Alibaba y Tencent), en trayectoria de colisión: El nuevo CEO de Ant Group, la subsidiaria de servicios financieros de Alibaba, quiere acelerar la evolución de Alipay hacia una «tienda online de todo» y afrontar la tendencia emergente de los clientes de comprar a través de «miniprogramas», o aplicaciones ligeras que funcionan sobre WeChat, la app de mensajería del otro gigante tecnológico chino y gran rival de Alibaba, Tencent. 400 millones de usuarios cada día usan estas miniprogramas para alquilar bicicletas, pedir comida o incluso comprar apartamentos, todo a través de WeChat. ¿Podría esto ser un anticipo de una batalla competitiva entre Amazon y Facebook en otros mercados? (Leer)